Breve historia
de la investigación
Los primeros restos
de Galvesaurus fueron extraidos por José María
Herrero y su familia durante los años 1980. De ahí su nombre. Poco después, en 1991, el Grupo
Aragosaurus de la Universidad de Zaragona comienza sus investigaciones en
Galve. Tras un primer trabajo de contextualización estratigráfica de los
yacimientos, los primeros esfuerzos del equipo se centraron en el estudio del
dinosaurio del yacimiento de Cuesta Lonsal. En 1993 comienzan la primera
excavación realizada por la profesora Gloria Cuenca Bescós, quien extrae una
vértebra cervical.
Tras los primeros
estudios, que revelaron el interés de éste saurópodo, y a partir de 2000 se
realizan nuevas campañas de excavación y preparación de restos fósiles en el
marco de un Plan Director de Actuaciones financiado por el Gobierno de Aragón.
Durante estos
trabajos, se excavaron entre otros restos no menos relevantes, una espina dorsal, diversos dientes
de dinosaurio terópodo y cocodrilo, varios fragmentos de vértebras dorsales y
cervicales. Pero sin duda la estrella de la excavación fue el sacro completo de Galvesaurus, el cual está actualmente siendo preparado en el laboratorio
de Paleoymás (cuyos paleontólogos y técnicos han trabajado con éxito en las
excavaciones y preparaciones del material de Galvesaurus desde e años 2000), también
financiado integramente por la Dirección General de Patrimonio Cultural del
Gobierno de Aragón.
A la derecha, José María Herreo conocedor de todos los emplazamientos de yacimientos del municipio con Luís Herrro, un gran amigo mío.
Jaume Riu
Galve desde Barcelona.